Esta entrevista fue realizada el día 13 de febrero de 2020 en los estudios de la radio de la Facultad de Castilla-La Mancha por Curro Pavón
>A pesar de su corta edad ha vivido los que haceres de la profesión por dentro. Sus palabras están llenas de ilusión, siempre mirando por el futuro y bien de la fiesta. Hablamos de Gonzalo I.Bienvenida.
Le quiero felicitar, desconozco los datos de audiencia, pero el programa Los Toros a través del podcast se ha situado entre los cincuenta más escuchados a nivel mundial, supongo que tanto como para Manolo, como para María José, como para usted habrá sido una gran inyección.
La verdad que ha sido una alegría muy grande, en el mes de diciembre la cadena Ser decidió prescindir del programa, lo cual fue un gran palo para todos los que formamos parte de él. Hubo varias reuniones en el mes de enero, se replantearon la posibilidad de continuar con el programa vía podcast y así ha sido. Lo importante es que el mundo del toro sigue estando presente en una casa como la Ser, ya sea por internet o en directo por la radio, ahora no se puede fallar ningún domingo y hacer que el mundo del toro siga haciéndose fuerte en lugares donde ya está presente.
Entramos en faena ¿Cuál es ese primer recuerdo taurino que se le viene a la mente?
He crecido en una casa llena de trajes de luces, de cabezas de toros, de cuadros taurinos… Desde muy pequeño tuve una afición tremenda, empecé a torear con los trapos que le quitaba a mí madre, todos los años pedía a los reyes un capote y una muleta y jugando al toro tengo mis primeros recuerdos.
¿En que momento empieza a darse cuenta Gonzalo de la importancia que impone el apellido Bienvenida?
Concretamente fui consciente de lo que significaba mi abuelo Antonio Bienvenida en el año 2000. Tenía en ese momento 7 años y la feria de Otoño se ilustró con una fotografía suya en solitario haciendo el paseíllo en Madrid. Yo no pude conocerlo y verlo en todos los carteles y en todas las entradas de todos los aficionados me hizo conocer esa sensación de vértigo de decir: “mi abuelo, no es solo para mí una persona importante, sino que mucha gente le hecha de menos, mucha gente le ha querido y mucha gente le sigue admirando”, aunque hayan pasado años de su muerte.
¿Qué siente Gonzalo cuando le llegan referencias sobre la personalidad de su abuelo?
Muchísimo orgullo, realmente mi abuelo fue un torero muy importante pero efectivamente lo que más orgullo hace sentir a un miembro de su familia es la forma que tenía de ser. Era generoso hasta un punto inimaginable, toreo en muchísimas ocasiones gratis, a favor de sus compañeros, de cualquier causa que lo necesitará y en el día a día era una persona muy simpática y muy amable, lo cual no quita que tuviera su carácter y luchará por las cosas que realmente quería. Una persona con principios, con ideales, defensor de la fiesta. Para mí es un orgullo muy grande ser nieto de una persona tan grande dentro y fuera del ruedo.
Precisamente tuvo en su haber el capote de paseo del maestro Joselito “El Gallo”, en este 2020 conmemoramos cien años de su trágica muerte ¿Qué significó este ilustre personaje en la historia del toreo?
Joselito El Gallo ha sido un torero grandioso, un genio, sin lugar a duda el toreo actual no se podría entender sin la aportación de Joselito. Ideó lo que ha sido uno de los pilares fundamentales para que la fiesta haya tenido continuidad que son las plazas monumentales, fue el primero que apostó por el tercio de muleta, dándose cuenta que era donde los públicos de verdad disfrutaban y entendían el arte del toreo. Aportó muchísimas suertes y creo que la figura de Joselito El Gallo en este centenario esta siendo bien reivindicada porque sin lugar a dudas el toreo a día de hoy no lo entenderíamos igual sin Joselito y me gustaría añadir que tampoco sin Juan Belmonte.
Hay momentos en los que la vida nos da un golpe y nosotros nos tenemos que levantar como lo hacen tantos toreros. – Gonzalo I.Bienvenida
Con el pasado siempre presente cambiamos de tercio y hablamos de actualidad ¿En que situación se encuentra la tauromaquia?
La tauromaquia está en un momento delicado, es ahora mismo un arte incomprendido por gran parte de la sociedad que no ha sabido actualizarse, ni ha conseguido estar de moda cuando la sociedad avanzaba en distinto sentido, de alguna forma creo que nos hemos quedado descolgados. Soy optimista, el mundo del toro tiene tal verdad y dentro del ruedo ocurren cosas tan importantes que todavía somos capaces de levantarnos y de continuar hacia delante. Todos podemos hacer desde nuestra pequeña parcela una buena labor de difusión de la fiesta, trasmitiendo la pasión que sentimos cuando estamos en una plaza de toros, transmitiendo esa admiración que tenemos hacia nuestros ídolos y por supuesto defendiendo la integridad y la bravura del toro que es fundamental para que la fiesta continúe en auge.
¿Qué valores le ha aportado este mundo en su corta trayectoria?
La verdad que este mundo para mí ha sido muy importante. He aprendido algo fundamental que es la palabra, cuando alguien en el mundo del toro me ha dado la palabra siempre se ha cumplido. Es un valor que debemos cuidar, mantener y sobre todo respetar. Son leyes que no están escritas pero que de alguna forma son importantes que las mantengamos.
He tenido la oportunidad de conocer desde dentro al maestro Juan José Padilla y más allá de los gustos artísticos ha sido un héroe, un personaje único, una persona grandiosa que ha sido capaz de superar situaciones terribles no guardando nunca el rencor al toro, eso perfectamente se pueda aplicar a la vida. Hay momentos en los que la vida nos da un golpe y nosotros nos tenemos que levantar como el maestro Juan José Padilla, como tantos toreros se superan de una forma extraordinaria, heroica, mirando hacia delante, amando y disfrutando la vida al lado del toro.
Se la hago a la inversa, ¿Cuál crees que es su principal aportación?
De momento, solamente he podido aportar mucha afición y muchas ganas de trabajar, me queda mucho por hacer. He tenido la oportunidad de conocer el proyecto de la fundación Toro de Lidia desde dentro, poniendo toda mi disposición a favor de la tauromaquia y luchando para el bien de la fiesta.
Colabora usted con dos de los principales medios taurinos, Los Toros en la Ser y en la revista Aplausos ¿Siente que ha cumplido parte de su sueño?
Sí, en parte sí, pero la verdad que son cosas que han ido sucediendo.
En el año 2016 tuve la suerte que contó conmigo Vicente Zabala para que empezará a colaborar en el periódico El Mundo. Vicente en todo este tiempo ha sido un maestro fantástico, es una persona que vive el periodismo con una intensidad tremenda, de él he aprendido el rigor, la inmediatez, la veracidad y muchos valores que valoro mucho al margen de la tauromaquia.
Siendo colaborador de El Mundo me surgió la oportunidad de participar en un proyecto llamado Taurocast que desgraciadamente fracasó por falta de financiación y falta de entendimiento por parte del sector profesional del mundo del toro que no comprendían una nueva difusión de la fiesta a través de streaming. Aquí fue donde conocí a Manolo Moles.
Mi primera intervención en el del equipo de los toros de la Cadena Ser fue en un momento muy delicado porque había muerto Iván Fandiño en Francia y Manolo me llamó bastante afectado diciéndome que estaban intentando recabar la mayor información posible, que habían visto un artículo mío en el diario El Mundo, que creían que yo conocía bastante bien el momento que estaba atravesando la fiesta y sobre todo lo que había ocurrido en Francia. Me pidió que colaborara con ellos ese mismo domingo y desde junio de 2017 estoy con Manolo Moles en el programa Los Toros.
En 2018 me llamo José Luis Benlloch a quién conocía por ser colaborador de programa Los Toros y me ofreció ser el nombre de la revista aplausos en Madrid. Hablé con Manolo y con Vicente, les trasmití mi ilusión por empezar en la publicación decana del mundo del toro, les expliqué que yo creía que era perfectamente compatible con el trabajo que desempeño en estos dos medios generalistas y me apoyaron desde el principio.
La verdad que trabajo mucho, diversifico mucho mi trabajo, son tres jefes fantásticos que me exigen, que también me enseñan y solo puedo dar gracias a dios por tenerlos a mi lado. En definitiva, no creo que haya cumplido mi meta con lo que he alcanzado, pero sí una parte ella.
El mundo del toro tiene tal verdad y dentro del ruedo ocurren cosas tan importantes que todavía somos capaces de levantarnos y de continuar hacia adelante. – Gonzalo I. Bienvenida
La noche del 29 de diciembre lanzas un auténtico mensaje y das una lección de profesionalidad a tener muy en cuenta por todos. En pleno directo Manolo Moles anuncia su adiós y continuas con el programa como si nada hubiera pasado ¿Cómo se vive una situación así?
Fue muy difícil, no sé si fue muy profesional o no, yo intenté darle naturalidad. Nosotros nos enteramos de la noticia escasas horas antes del programa y entre todo el equipo llegamos a la conclusión de que el programa había que hacerlo como siempre y por todo lo alto. Asumí esa responsabilidad, no sé si lo hice bien o mal, intenté solucionar la papeleta y dar las gracias por la oportunidad que me habían dado.
Afortunadamente el programa continua, se ha perdido la magia del directo, pero estáis de vuelta. No podían desaparecer casi 50 años de historia ¿Cómo explica todo lo acontecido?
A toro pasado es muy difícil, ahora más que hacer un análisis de lo que ocurrió hay que hacer un análisis de lo que ha ocurrido. Se han dado cuenta de la fuerza que tiene el mundo del toro, el movimiento que hubo en las redes sociales, de la fuerza que tiene una marca como Manolo Moles después de casi 50 años en directo en una radio nacional y se han dado cuenta de que no podían acabar con eso de un plumazo. No sé las causas reales de porque se rescindió el contrato, pero lo que sí se es que la Cadena Ser sigue apostando por los toros y ha querido hacer este programa clásico de la casa vía podcast.
Por último y para terminar ¿Cuál es ese consejo que da Gonzalo Bienvenida a esa futura generación que como él lucha y defiende la tauromaquia?
No soy nadie para dar un consejo, lo único que puedo decir al que tiene afición, al que quiera ser alguien en el mundo del toro es que no se canse de leer. Hay libros fantásticos, hay obras maravillosas que todos debemos conocer. Es muy importante tener afición al toro y sobre todo a la historia del toreo. Leer a ganaderos de otras épocas que a lo mejor hayan desaparecido, toreros que a lo mejor no fueron tan importantes. Realmente todo el mundo te puede aportar, por lo tanto, tener los ojos muy despejados, estad atentos de todo lo que ocurre en el mundo del toro y especialmente mirar por el retrovisor y leer sobre la historia del toreo.
Entrevista realizada a Gonzalo Bienvenida
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El Alguacilillo 
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